El Laberinto del Fauno

jueves, octubre 19, 2006

A petición de Nika, hoy os voy a comentar que me pareció la película de Guillermo del Toro. Pero esta reseña va a ser diferente...
[Conversación mantenida entre el autor del blog y el desconocido escritor Jordan Davies, una tarde cualquiera tras ver El Laberinto del Fauno]:
Jordan: Oye, David, ¿no crees que la película es demasiado larga y su ritmo es más lento que los peñazos, digo los clásicos, del cine japonés?
Yo: En absoluto, hacer una película de menos de dos horas en la que conviven dos tramas y cuyo ritmo no decae en ningún momento es un gran acierto tanto de guión como de dirección.
J: No me negarás que la conjunción de guerra civil y fantasía es muy trillada.
Yo: Esa conjunción como tú dices ya ha sido utilizada antes, a bote pronto se me ocurren tres relatos y un par de cortometrajes, pero es un hito en el cine español. Y aunque se sirve de una imaginería visual anglosajona (casi lovecraftiana), ha tenido que venir un mexicano a reivindicar la mitología española. Porque los faunos (igual que las meigas, los ogros, los lobisomes, las hadas, etc...) pertenecen a nuestra mitología pero como hemos estados asfixiados culturalmente tantos años por el realismo pobre de posguerra parece que nos hemos olvidado de donde venimos.
J: Sí, vale. No me sermonees más. ¿Qué me dices de los actores? No me dirás que el personaje del capitán Vidal es creíble. Un malo típico y tópico.
Yo: Te equivocas. Piensa que el contexto de la historia es el de la guerra civil española, y en las guerras sale a relucir lo mejor y lo peor del ser humano...
J: Ya. Y ahora me dirás que no es manido que los buenos sean los republicanos y los malos los franquistas.
Yo: Piensa lo que quieras pero la guerra civil fue, mayormente, un enfrentamiento entre militares y civiles. Y dejando la política de lado, Sergi López hace un papel genial, exhaustivo y minucioso en los detalles. Maribel Verdú está espléndida; igual que Alex Angulo, un actor pelín histriónico, que se adapta al tono de la película perfectamente. La niña protagonista, sin embargo, no termina de convencerme (quizás esté ensombrecida por el trabajo de los adultos) y el papel de Federico Luppi (mi actor preferido, ojo) como rey del inframundo (con acento argentino) es chocante y rompe un poco la seriedad de la película.
J: ¡Vaya! Me lo parece a mí o le ves fallos a la película.
Yo: Hombre no es una película perfecta pero...
J: Faltaría más, siendo tan peligrosamente parecida a La joven del Agua.
Yo: Eso no es del todo cierto. La única similitud con la película de Shyamalan es que son dos cuentos de hadas para adultos. El tono de la película del estadounidense es más ligero y además hace un mayor uso de mecanismos típicos del género de terror.
J: La próxima vez que vaya al cine contigo recuérdame que beba antes, quizás así le vea la gracia a los bodrios que te tragas. Voy a por una cerveza...

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Para Jordan Davies:

Si piensas que la película es larga y lenta, no la habrás visto. Entre todas las escenas intrigantes, te aseguro que no te sobrará tiempo para mirar el reloj.

Muy usada la conjunción de guerra civil y fantasía - no sé yo. Alguna vez habrá aparecido antes, seguro, pero entre todas las pelíclas de guerra que se ha hecho, las que juegan con un mundo fantástico paralélo son una minoría diminuta. Y lo mejor es, que como la fantasia no tiene límites, esas películas no tienen porque parecerse una a la otra, aunque su tema principal, la guerra, ya la hemos visto de todas sus perspectivas.

Los actores - yo no me quejo de ningúno. De hecho, creo que incluso la niña lo hizo muy bien. Estoy harta de las pelis donde los niños sobreactuan para transmitir sentimientos. En cambio la niña era bastante poco expresiva. Para algunos gustos, quizá demasiado poco. Pero para mí, el personaje había pasado por mucho y su reacción a todo eso había sido aprender a controlar sus sentimientos y mantener una apariencia tranquila - a encerrarse dentro de su cascarón. Vamos, como una reacción alargada, casí permanente, de post-trauma. Esta interpretación, desde luego, encaja bien con que, a la vez de mantener esa apariencia de tranquilidad, su mente trabaja para resolver los sentimientos detenidos, inventándose un mundo imaginativo.

Para dar una opinión negativa: la escena que menos me gustó fue la en que la chica baja a confrontarse con el monstruo come-niños. Me parecía increible que ella se centrara en la comida que había en la mesa, cuando al lado tenía un bicho con un aspecto tan horrible. Me imagino que había algo en el ambiente que le hacía actuar así, además de estar privado de tanto delicatessen durante tiempos de guerra. Fuera lo que sea, la escena no me transmitió eso, sino la niña quedó como una estúpida glotóna.

Ah, una cosa más, Jordan Davies. Yo había tomado dos (2) cañas antes de ver la peli. Igual tienes razon, sólo me ha gustado por eso. Por si acaso, seguiré con esa receta, así no me decepcionaré jamás!

DJ dijo...

Coincido totalmente contigo, nika. Tu análisis me ha gustado mucho. Si quieres algún día publicar algo en Internet, aquí tienes mi humilde blog para servirte. Respecto a Jordan Davies, quizás debiera dejar de lado las malas compañías...

DJ dijo...

Coincido totalmente contigo, nika. Tu análisis me ha gustado mucho. Si quieres algún día publicar algo en Internet, aquí tienes mi humilde blog para servirte. Respecto a Jordan Davies, quizás debiera dejar de lado las malas compañías...

Anónimo dijo...

El laberinto del fauno, no es mas que una pelicula que intento recordar que la imaginacion y el mundo de los niños no es visto desde el mismo angulo de los adultos,pero yo no vi ninguna fantasia al respecto,porque deja bien claro que eso solo sucede en la imaginacion de la niña y en ningun momento es algo colectivo, pues segun la definicion de fantasia, es cuando un hecho extraordinario sobrepasa la realidad y entendimiento de los personajes y en este caso eso nunca sucedio... en fin, el director- igual de realista que su trillado personaje a la hitler - no pudo evitar darle ese patetico final....al fin y al cabo es una pelicula como cualquiera que pasara a ser olvidada como tantas.