¡Acabo de terminar A feast for crows (léase a fist for crous)! Y a bote pronto se me ocurren dos cosas.
La primera (spoiler) : ¡Qué pedazo de manipulador estás hecho George Martin, lo de ahorcar a Brienne al final del libro es un golpe bajo!
La segunda : Las cara de tonto que se te queda cuando terminas el libro (con muchísimas ganas de seguir conociendo como les va a tus personajes favoritos) es sólo comparable a la que se te queda cuando te ves el último capítulo de la 2ª temporada de Perdidos.
To be continued...
lunes, enero 29, 2007
Publicado por DJ en 10:56 a. m.
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1 comentarios:
Cara de tonto, y casi angustia vital de no poder devorar el cuarto libro a renglón seguido. A Martin le debería denunciar el Ministerio de Sanidad porque nos está convirtiendo a unos cuantos en adictos al negro sobre blanco Westeriano.
Para ver los efectos secundarios:
http://members.virtualtourist.com/m/d2fa2/
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